Si estás pensando en tu viaje de Semana Santa y aún no sabes dónde ir, aquí van seis propuestas. Algunas son ofertas de viajes baratos en Semana Santa, como dormir en un convento; otras son un poco más caras, pero también más glamurosas, como hacerlo en un riad de Marrakech. Sea cual sea tu presupuesto, en este post puedes encontrar ideas y ofertas para tu próxima Semana Santa.
Actualizado por Paco Nadal el 08 de enero de 2024.
Semana Santa es la fecha ideal para visitar Marrakech. Un viaje de mil años en el tiempo que nos sumerge en todo el exotismo y la fantasía de los bazares, de las medinas atiborradas de olores y colores. Y una buena manera de empaparse de esa singularidad que aún impera en la ciudad marroquí es alojarse en un riad. Se trata de edificios históricos, algunas veces con la categoría de palacios, otras de viviendas nobles de varios pisos en los que habitaba una familia pudiente. En todos los casos, conservan el sabor de la arquitectura y el interiorismo del Magreb, con celosías, suelos de azulejos, patios con fuentes, mobiliario original y un número reducido de habitaciones. Muchos están en el interior de medinas históricas y suelen contar con restaurante propio. Para sentirse como en Las mil y una noches. Te recomiendo Riad Wazani, en el corazón de la vieja medina y con spa propio. ¿Te apetece? En este post te cuento mucho más sobre Marrakech, visitas y lugares sugerentes, para que no te dejes nada por ver y disfrutar.
Si para tus viajes de Semana Santa lo que buscas es tranquilidad, vida interior y paz para el espíritu, no hay duda: debes reservar con celeridad un lugar en alguno de los casi 600 monasterios repartidos por toda la geografía nacional que admiten huéspedes. La experiencia no defrauda; hay, incluso, quien se engancha a ella. Suelen ser lugares espartanos, donde no existe servicio de habitaciones, ni teléfono, ni secador de pelo en el baño, ni televisor, sino recogimiento, silencio y naturaleza suficiente para cualquier soliloquio. Todo muy pío. Aunque algunos, como la hospedería del monasterio de Valvanera, en La Rioja, funcionan como un clásico hostal de dos estrellas, con habitaciones dobles con baño privado y WIFI, lo normal es que los monjes aclaren a los huéspedes que «no es un hotel ni un lugar para hacer turismo» sino de un lugar en el que «participar del clima espiritual de la comunidad». Algunos, como el de Samos, en Lugo, es exclusivo para hombres; en el de Las Huelgas, en Burgos, solo pueden entrar mujeres. Los hay famosos (Santo Domingo de Silos, en Burgos, donde se escucha canto gregoriano en vivo y en directo), enormes (Santuario de Lluc, en Mallorca, con más de un centenar de habitaciones), o cargados de arte (Santa María de Vallbona, en Lleida, joya arquitectónica del románico y el gótico). En general, todos exigen respeto a las zonas de clausura y a los horarios de comidas de la comunidad. Las reservas han de hacerse con antelación y directamente en cada monasterio, aunque muchos de ellos ya se anuncian y reservan en plataformas como Booking.
¿Qué tal Flandes como destino de ese viaje de Semana Santa 2024? Aunque Brujas es la postal más conocida y visitada de Bélgica, el país tiene otras muchas ciudades impactantes. Por ejemplo, Gante, una maravilla de la arquitectura renacentista con un casco histórico peatonal lleno de canales, iglesias, palacios flamencos y terrazas en las que los belgas aprovechan cualquier rayo de sol para degustar la bebida nacional, la cerveza. Hay más de 350 tipos, a cual más sabrosa. Uno de los mejores sitios para probarlas es Dulle Griet, una cervecería varias veces centenaria en la plaza del Mercado de los Viernes. Para dormir: te recomiendo el NH Gent Belfort ubicado en pleno centro histórico de Gante y a precios razonables. Para comer: la brasería Pakhuis, tiene muy buen surtido de mariscos, cocina flamenca e internacional. Por su parte, Amberes es una ciudad moderna que conserva también un excelente casco histórico. Pero Amberes es, sobre todo, la ciudad de la moda belga. Aquí está el famoso museo de la Moda, de donde han salido muchos de los diseñadores contemporáneos europeos más cotizados, entre ellos los que forman el grupo de los Seis de Amberes, con tiendas propias en el centro de la ciudad. Y ¿cómo olvidar Bruselas? La capital belga tiene muchos rincones que ver desde iglesias, increíbles museos y placitas llenas de ambiente para una visita de dos o tres días. Amplia aquí toda la información los sobre sitios que ver en Bruselas. Y para decidir tus distintos alojamientos, recuerda que puedes hacerlo cómodamente aquí.
Los que mejor me conocen ya saben de mi debilidad por los balnearios. Darse ese gusto en Semana Santa debería ser sagrado. En las tres provincias aragonesas encontrarás dónde cuidarte y descansar. Piscinas termales, masajes, tratamientos corporales muy especiales... y, siempre, la calidad de sus ricas aguas, que convierten cualquiera de estos balnearios en el oasis del urbanita. Eso sí, los más activos, podrán también disfrutar de la naturaleza y del patrimonio de la zona, por ejemplo, si se alojan en el Balneario Vilas del Turbón, en Huesca, o en el de La Virgen, en Jaraba (Zaragoza). Estos son dos, pero en el post Los mejores balnearios de Aragón, podrás ver 7 más a fondo para acertar en tu elección.
Un viaje a Budapest, una de las ciudades más bellas de Europa, es siempre una buena opción para los amantes del turismo en ciudades. Su patrimonio arquitectónico, su intensa vida cultural y social... y, por supuesto, la posibilidad de realizar excursiones como la del recodo del Danubio o la del lago Balatón, el mar de agua dulce de Hungría. Budapest nace de dos antiguas ciudades a ambas orillas del Danubio (donde además puedes realizar un paseo en barco al anochecer): la colina fortificada de Buda, la parte occidental, una zona escarpada con bosques y barrios residenciales prestigiosos, y frente a ella, en la llanura, Pest, donde se ubica el Parlamento y la Iglesia Matías. En el post Sitios que ver en Budapest y alrededores, encontrarás todo lo necesario para disfrutar y aprovechar al máximo tu estancia en la capital húngara. Para la búsqueda de tu alojamiento, te recomiendo Pest.
Procesiones para los viajes de Semana Santa: un clásico. Pero como desfiles y procesiones de Semana Santa hay por toda España, ¿por qué no buscar algo que sea original? Y entre los desfiles más curiosos de Semana Santa están los de la localidad murciana de Lorca, porque la suya no se parece a ninguna otra semana de Pasión. En Lorca no hay procesiones: hay desfiles bíblico-pasionales, que no es lo mismo. Más de mil personas ataviadas según la época de la Biblia y 300 caballos, enjaezados con ricos mantos bordados a mano, rememoran viejas civilizaciones ya desaparecidas. En los desfiles de Lorca se sustituyen los tradicionales y estáticos pasos con santos de madera por cuadros escénicos y teatralizados representados por los propios vecinos, dignos de una ópera romántica o de una producción hollywoodiense de Cecil B. DeMille, que han ido ganando en espectacularidad a medida que la tecnología avanzaba. Todos ellos desfilan por las calles de Lorca los dos días grandes de la fiesta, Jueves Santo y, muy en especial, Viernes Santo, ante los miles de visitantes que abarrotan el recorrido. En los cortejos procesionales tienen cabida el rey Nabuconodosor y la reina de Saba. Las carreras de cuadrigas y la llegada de Moisés a la Tierra Prometida. Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis y el gran Salomón. «Una locura colectiva», como la definió el premio Nobel Santiago Ramón y Cajal. Lorca tiene además muchos lugares para visitar, no en vano es una de las localidades más monumentales de Murcia, así que no dejes pasar la oportunidad de realizar una visita guiada por Lorca o conocer su castillo de cerca. Más información de Lorca y su Semana Santa aquí. Te hablo también de Lorca en este post que escribí sobre cinco escapadas de fin de semana en Murcia. Para alojarse, el Parador de Lorca, uno de los más modernos establecimientos de la red de Paradores, ubicado en el interior del castillo.