Gante (Bélgica) es una de las joyas arquitectónicas de Flandes. Uno de los cascos históricos más bonitos y mejor conservados de Europa. Cuando piensan en hacer turismo en Gante, muchos viajeros creen que se puede resolver en una jornada para regresar luego a sus hoteles de Brujas o Bruselas. Craso error. La ciudad que vió nacer al emperador Carlos V tiene muchísimo que ver para un solo día y además, por la noche se magnifica su encanto medieval. Te cuento algunos sitios imprescindibles de ver, y sobre todo, tiendas, restaurantes y cervecerías curiosas que no te puedes perder si decides visitar Gante.
Actualizado por Paco Nadal el 30 de noviembre de 2022.
Es la plaza principal de la ciudad y el centro social de la vida en Gante, por la que pasarás cien veces durante tu visita. Siempre llena de terrazas, tranvías, caminantes y buen ambiente. Una de las fachadas principales es la del antiguo edificio de Correos, construido entre 1898 y 1907, hoy reconvertido en centro comercial. Enfrente está la iglesia de San Nicolás, un soberbio templo de estilo gótico levantado a partir del XII con las aportaciones de los gremios de comerciantes y marineros, siempre muy poderosos en la ciudad de Gante.
A la entrada de Korenmarkt, por la esquina del edificio de Correos, se llega al puente más famoso y transitado de Gante: el puente de San Miguel sobre el río Lys. Su estratégica situación permite ver desde un mismo punto casi todos los lugares emblemáticos de la ciudad: los muelles de Graslei y Korenlei, el castillo, la lonja del Pescado y muy en especial, las tres torres emblemáticas del skyline de Gante —la de San Nicolás, la del Ayuntamiento y la de la catedral— casi en fila. ¡La foto obligada de toda visita a Gante! Por debajo hay siempre un trasiego constante de las lanchas turísticas que recorren los canales.
De las muchas calles con canales que tiene Gante, la más fotogénica y popular es la que está justo detrás de la plaza Korenmarkt (a espaldas de Correos), visible desde el puente de San Miguel. En realidad son los dos muelles del antiguo puerto de Gante, uno de los más activos y ricos de Flandes porque monopolizaba el comercio de cereales. Visto desde el puente de San Miguel, el de la derecha es el muelle Graslei, con las fachadas escalonadas del antigio almacén de Grano (año 1200), la Tolhuise, la casa del gremio de los Marineros Libres y la fachada posterior de Correos. A la izquierda, el muelle Korenlei, también con bellas fachadas de casas renacentistas con sus gabletes triangulares. Es la calle con más ambiente de la ciudad a cualquier hora del día o la noche. Con un montón de turistas y locales sentados al borde del canal, paseando en bici o llenado las numerosas terrazas de restaurantes.
Como ya te he comentado, el bellísimo edificio de Correos se reconvirtió en centro comercial. Pero no todo. La parte posterior, la que da a Graslei, es ahora 1898 The Post, posiblemente el hotel con más encanto de Gante y mejor situado: en pleno corazón del barrio histórico. 37 habitaciones y suites decoradas de una manera cálida y deliciosa y un salón-bar con vistas al Korenmarkt en el que dejar pasar las horas. No es una juega barata (entre 175 y 300 euros, según habitación y fechas), pero si puedes darte un capricho, no lo dudes. Si quieres consultar el resto de la oferta alojativa en Gante, hazlo en este enlace.
Otra de las calles típicas del centro es esta, continuación del muelle Korenlei, muy agradable cuando hace buen tiempo y por las noche de verano porque se instalan también muchas terrazas. Aquí encontrarás un bar emblemático: el famoso GIRI Café, donde hacen algunos de los mejores cócteles de la ciudad. Y para compras curiosas: la tienda The Fallen Angels, famosa juguetería con una impresionante colección de muñecas, postales, objetos relacionados con el cine, etc.
Otro famoso bar frecuentado por gente local y estudiantes. Está justo justo enfrente del castillo, tiene muy buen ambiente, cócteles, buena cerveza belga y aperitivos. Puedes pedir una ginebra Save the Queen, hecha en Gante; te llamará la atención porque se destila con miel.
Famosísima cervecería en Groentenmarkt 9, en un callejón junto al puente de Grasbrug. Tiene más de 300 tipos de cerveza (entre ellas las tres de la casa: Gandavum, Klokke Roeland y Mammelokker) y una de las mejores terrazas abocadas al río Lys, con excelentes vistas al centro de la ciudad. Un interior muy auténtico, decorado con flores de lúpulo, en el que suele haber conciertos de música en directo. La terraza se pone a reventar en cuanto llega el buen tiempo.
La casa de chupitos, justo al lado de la cervecería anterior. Otro bar centenario (y marrón) frecuentado por locales y turistas especializado en copas y chupitos de genevers (bebida espirituosa parecida a la ginebra típica de Holanda y Bélgica con sabor a enebro y 40 grados de alcohol). Aseguran que tienen más de 100 tipos de genevers de toda Bélgica y del norte de Francia.
El antiguo mercado municipal de la carne, una gran nave con artesonado de madera en pleno centro de la ciudad, muy cerca de la plaza Korenmarkt, se ha reconvertido en un gran espacio gastronómico, con restaurantes y tiendas delicatesen donde sólo se vende y sirve productos de Gante y provincia. Así, puedes degustar el chorizo de caballo, un bocadillo de cabeza de cerdo, auténtica cerveza belga o chupitos genevers… pero no Coca-cola, porque no hay.
Es una centenaria fábrica de mostaza que tiene tienda justo enfrente del mercado de la Carne. Llevan desde 1860 en este local regentado por la misma familia aunque empezaron en 1790 en otro local de este mismo barrio. Puedes comprar mostaza a granel Y te la sirven en tarros de cristal de la medida que quieras. La decoración de la tienda es genuina, no dejes de entrar, compres o no compres.
Justo al lado de la tienda de mostaza encontrarás esta panadería, otro comercio lleno de encanto. Tiene panes especiales y de todo tipo de granos. Es donde suele ir la gente de Gante a comprar su pan favorito. Viernes, sábado y domingo hacen un pan especial de pasas y frutas escarchadas al que llaman Trío (porque esta horneado con tres tipos de harinas) y dura fresco mucho tiempo.
Gante es una de las ciudades más monumentales de Flandes. Todo el centro es un compendio de bellísimos edificios históricos y por lo tanto, los grafiteros no eran muy bienvenidos. En los años 80 el Ayuntamiento ideó una solución para respetar su creatividad sin estropear espacios históricos: les cedió una calle entera para que cada artista pudiera hacer lo que quisiera. El resultado es Werregarenstraat, el callejón de los grafitis, convertido ya en una atracción turística más en la ciudad.
¡Posiblemente, los mejores gofres de la ciudad… y de todo Bélgica! Y eso que en este tema, la competencia es dura. Fueron ellos los que inventaron, hace ya más de dos siglos, el gofre bruselense, una modalidad de esta golosina hecha con harina, sal, azúcar, leche, huevos y mantequilla de la que conservan la receta. Los gofres de Max están crujientes por fuera y tiernos por dentro y puedes pedirlos con más de 20 variedades de complementos encima. El negocio lleva regentado por la misma familia desde hace seis generaciones. El local, decorado al estilo Belle Époque años 20, está en Goudenleeuwplein 3.
Otro lugar de visita imprescindible es esta fortaleza construida por los condes de Gante en 1180. Es el único castillo medieval de Flandes que conserva intacto todas sus murallas y sistema de defensa. Esto lo hace muy interesante, aunque en el interior no queda gran cosa de interés. Dicen que aquí se inventó la chimenea, gran avance tecnológico para la época. Quizás lo mejor de la visita sea la vista de la ciudad de Gante desde lo alto de las murallas. Te recomiendo hacer la visita con la audioguía que dan a la entrada (incluida en el precio de la entrada); si no, no te vas a enterar de nada.
Es la “cervecería de la zapatilla”, una antiquísima y tradicional cervecería flamenca en la plaza del Mercado de los Viernes donde presumen de servir más de 500 tipos de fermentados de la cebada. Si solo te vas a tomar una cerveza durante tu estancia en Gante (cosa que dudo), tienes que tomártela aquí. El sobrenombre se debe a que a los clientes que piden su cerveza especial Kwak, de 1,2 litros y servida en una espectacular jarra, tienen que dejar un zapato como fianza para garantizar que devuelven la jarra. La plaza del Mercado de los Viernes es muy elegante, flanqueada por bellos edificios renacentistas y de otras épocas, muy grande además para las medidas de los espacios urbanos medieveles de Gante.
Entre los muchos edificios señeros de la ciudad sobresale la catedral de San Bavón, una gran obra del gótico brabantino, con la característica única torre en el centro de la fachada de este estilo que creció en Amberes, Malinas y Bruselas. Destaca la gran altura de su nave central. Solo el baptisterio sería más grande que una catedral normal. Aunque en realidad la nave sólo tiene 26 m de altura, pero parece mayor porque no hay capiteles. La joya de la catedral es La adoración del cordero místico, un políptico de 12 tablas pintado por los hermanos Van Eyck, uno de los grandes talleres de pintura flamenca del siglo XV. Hubert y Jan Van Eyck tardaron 15 años en completar esta gran obra, que a lo largo de los siglos ha sufrido numerosos robos, amputaciones y pérdidas. Está expuesta entre enormes medidas de seguridad; las tablas de de arriba son las originales; las de abajo son copia porque las pintadas por los Van Eyck están en el museo de Bellas Artes. Toda la obra se sometió a una exhaustiva restauración para mostrarla en una nueva capilla del baptisterio de esta catedral.
Un lugar que te recomiendo para cenar es esta enorme brasería con dos pisos a donde suelen venir la gente local y muy pocos turistas. Tiene muy buen surtido de mariscos, cocina flamenca e internacional y un excelente servicio, con amplia bodega de cervezas y vinos. Un lugar de lo más recomendable. Está en la calle Schuurkenstraat, a un paso de la plaza principal.
El centro histórico de Gante es peatonal y muy pequeño por lo que puedes moverte por él a pie sin problema. Si te alojas lejos del centro o llegas en tren desde Bruselas o Brujas puedes usar la eficiente red de tranvía y autobús. La compañía de transporte público se llama De Lijn. Los billetes sencillos, tanto para tranvía como autobús, cuestan tres euros y son válidos durante una hora. Hay billetes de un día por 7,5 € y bonos de 10 viajes por 17 €. Tienes que comprar los billetes antes de subir en cualquiera de las tiendas de De Lijn o a través de la app De Lijn, que te puedes descargar en tu smartphone. La mayoría del comercio cierra a las seis de la tarde así como domingos y festivos. En este post te descubro algunas tiendas originales o divertidas pero puedes consultar todo sobre el comercio de Gante, así como actividades y excursiones en la web de Visit Gent.
Si vas a estar dos o más días en la ciudad te recomiendo comprar la CityCard Gante, una tarjeta que incluye entradas a todas las principales atracciones y monumentos, acceso libre al transporte público (tranvía y bus), una ruta en bici y un paseo en lancha turística de 45 minutos. ¡Merece y mucho la pena! En cualquier caso, te recomiendo empezar tu visita por la estupenda oficina de Turismo, donde tienen todo tipo de planos e información interactiva. Está en Sint-Veerleplein 5, en pleno centro, a un paso de la Korenmarkt.
Aquí tienes mis sitios imprescindibles para una visita inolvidable a esta ciudad. ¡Gante se hizo para disfrutar de la vida!