A solo 8 kilómetros de Úbeda y en eterna –y se supone que también sana– rivalidad histórica aparece Baeza. Ambas forman un caso único de dos ciudad ricas y monumentales en un palmo de distancia. Baeza es más pueblo que Úbeda, pero a cambio tiene un casco histórico más compacto; se apiñan en torno a la catedral para formar un conjunto histórico de tal magnitud que se han podido rodar películas de época en ella sin mover una papelera. Si, además, el paseo callejero tiene lugar por la noche, hay que ser de piedra para no sentir el aliento del Renacimiento humedeciendo los poros de la piel. En 2023 se cumplen veinte años desde que la UNESCO las reconociera con el título de ciudades Patrimonio de la Humanidad. Con Úbeda, Baeza forma un dúo imbatible para disfrutar de un fin de semana en el Renacimiento andaluz.
Publicado por Paco Nadal el 14 de octubre de 2023.
Un buen lugar para iniciar la ruta urbana es la plaza del Pópulo. Primero porque es un espacio monumental de envergadura que resume buena parte de la historia arquitectónica de Baeza y segundo porque aquí está su oficina de Turismo en los que fueron las Escribanías Públicas. Muchos son los elementos que se reúnen en tan pequeño espacio. En el centro, la Fuente de los Leones, con cuatro felinos que vomitan agua y escoltan a Imilce, mujer del general cartaginés Aníbal, talla que probablemente salió del yacimiento romano de Cástulo (Linares). En la fachada sur, la puerta de Jaén, reconstrucción de una de las antiguas puertas de la muralla, y el arco de Villalar, obra conmemorativa encargada por el Concejo para celebrar la victoria de las tropas de Carlos V en la batalla de Villalar contra los ejércitos de Padilla, Bravo y Maldonado, líderes de la revuelta de los Comuneros (1520-1521). Frente a la puerta está la Antigua Carnicería, un edificio de 1547 que funcionó como matadero hasta hace unas décadas. Y cerrando la plaza por el este, en el costado oriental de la plaza, un edifico plateresco, insignia también de la arquitectura civil, que acogía los juzgados y el registro público. Observe un balconcillo que hay entre este edificio y la puerta de Jaén. Según la tradición desde él celebró un sacerdote la primera misa de la localidad tras la Reconquista.
Dónde: plaza del Pópulo.
Desde la plaza del Pópulo, y por detrás de las Escribanías Públicas (actual oficina de Turismo), salimos a la calle Romanones y la seguimos hacia la izquierda en busca del edificio de la Antigua Universidad, no sin antes ver a la izquierda el arco del Barbudo, otro portón de la muralla que rodeó Baeza. A su lado podemos ver la Antigua Universidad, una gran obra renacentista con patio interior de doble arcada que, gracias a una bula papal de Pablo III, en 1538 se convirtió en la primera Universidad baezana. Funcionó como tal hasta 1824 y en ella dio clase de francés Antonio Machado, que vino a vivir a Baeza en 1912, tras la muerte de su esposa. La apertura de la Universidad y la mejora del negocio textil en el siglo XVI hicieron que la ciudad viviera un verdadero renacimiento, no solo en el aspecto arquitectónico, sino en el humanístico y en el económico.
Dónde: Antigua Universidad.
La calle Romanones desemboca en la plaza de Santa Cruz, un genuino espacio donde parece que nada hubiera cambiado en los últimos 400 años. El elemento más antiguo de la plaza es la iglesia de Santa Cruz, un templo que sigue los patrones del románico más tardío y que está considerado uno de los pocos monumentos románicos de Andalucía. Al otro lado sorprende una fachada, única en la ciudad. Es el palacio de Jabalquinto, el mejor exponente del estilo Reyes Católicos, notable palacio del siglo XV que perteneció a Juan Alonso Benavides, primo de Fernando el Católico y miembro de una de las dos familias nobiliarias que controlaron Baeza durante centurias (la otra era la de los Carvajales). Su fachada es el emblema de la ciudad y muestra una decoración recargada a base de puntas de diamante, clavos y escudos nobiliarios de la familia. Con todo, los elementos más característicos son los dos contrafuertes semicilíndricos rematados con mocárabes. La galería que culmina el conjunto de la fachada tiene ya influencias renacentistas, al igual que el patio interior.
Dónde: palacio de Javalquinto.
Llegamos al entorno más bello y mejor conservado de una ciudad en la que es difícil decidir a qué entorno se le concede este título. La plaza de Santa María fue el espacio público principal de la urbe en época árabe y lo siguió siendo con la ocupación cristiana. En el centro queda la fuente de Santa María, la primera que hubo en Baeza, coronada con un arco triunfal de época de Felipe II. El edificio de sobria y alargada fachada barroca es el seminario de San Felipe Neri (1660), perteneciente al obispado de Jaén, y que funcionó como colegio sacerdotal hasta 1969; podrás visitar su patio renacentista. Hoy es la sede Antonio Machado de la Universidad Internacional de Andalucía. El otro edificio de la plaza, de carácter civil, son las conocidas como Casas Consistoriales altas, aunque nació como palacio de la familia del noble Gil Bayle que, a su muerte, lo cedió a la ciudad como sede del Ayuntamiento (en la fachada pueden verse los escudos Juana la Loca y Felipe el Hermoso). Actualmente es la sede del conservatorio. Y cerrando el conjunto, el primer templo baezano y segundo recinto catedralicio de la provincia de Jaén, la Catedral de Baeza, resumen también de estilos nacida sobre los restos de la mezquita aljama. Sobre el solar se han ido superponiendo proyectos, hasta dos de estilo gótico, que fueron al final reemplazados y ampliados por el actual edificio renacentista diseñado por Andrés de Vandelvira, quien la concibió con planta basilical de tres naves, separadas por pilares cruciformes con columnas adosadas. Del interior destaca el retablo barroco y el claustro gótico. Por fuera se ven más huellas de tiempos pasados. Así, la Puerta de la Luna, en la fachada que da a la torre, es un arco de herradura polilobulado propio del gótico-mudéjar. La Puerta del Perdón, en la fachada sur, es de orden gótico flamígero, como el palacio de Jabalquinto, de la que es contemporánea. La torre reposa sobre la base del alminar hispanomusulmán. Es muy aconsejable la subida hasta la linterna del campanario para disfrutar a vista de pájaro de la urdimbre monumental de Baeza.
Dónde: Catedral de Baeza.
Horario: de lunes a viernes, de 10:00 a 14:30 y de 16:30 a 20:00 horas. Sábado, de 10:00 a 20:00 horas. Domingo, de 10:00 a 14:30 y de 16:00 a 18:30 horas. Último acceso 45 minutos antes del cierre. Cierre de la torre, 20 minutos antes del cierre de la catedal.
Entrada: general, 6 €. Mayores de 65 años, 5 €. Jóvenes y estudiantes (13 a 25 años) y personas con diversidad funcional (acreditación imprescindible), 4 €. Menores de 12 años, gratis. Todas las entradas incluyen la autoguía. Puedes comprar tu entrada on line en este enlace.
Como pasa en Úbeda, también quedan en Baeza otros edificios y lugares de interés diseminados por el casco urbano. Merece la pena darse un paseo a lo largo del eje de la plaza (y paseo) de la Constitución y la calle de San Pablo. En un costado de la plaza de la Constitución, las Casas Consistoriales bajas son una edificación notable y, un poco más atrás, en la calle Benavides, el actual Ayuntamiento, excelente edificio plateresco que fue construido a las afueras de la ciudad como casa del corregidor y cárcel en 1523. Quedan cercanos el Hospital de la Purísima Concepción y el convento de San Francisco, desde donde podemos bajar a la plaza de España para ver otro de los monumentos más antiguos de la ciudad, la torre de los Aliatares, bastión defensivo de la muralla árabe al que se le añadió el reloj en el siglo XIX. La plaza de España da paso a la calle de San Pablo, peatonal y muy concurrida (aprovecha para hacer una parada y tomar un café con alguna pasta artesana), una de las mejores zonas comerciales de Baeza, llena también a ambos lados de palacios de diferentes épocas, como la casa Cabrera, la Casa Acuña, el Palacio Cerón o el Palacio de los Condes de Garcíez. El gran templo que llena otro de los laterales de la plaza es la iglesia de San Pablo, con una fachada barroca que da a esta calle, aunque la obra es gótica del siglo XV.
Dónde: plaza de la Constitución / calle de San Pablo.
La cultura del aceite es parte primordial de la economía y de la historia de Baeza. En su término municipal trabajan media docena de importantes empresas oleícolas y basta un vistazo a los campos que rodean la ciudad para saber cuál es el monocultivo dominante. La relación de Baeza con el jugo de la aceituna se ha recogido en el Museo de la Cultura del Olivo, instalado en una antigua hacienda jesuita del siglo XVII que una familia madrileña puso en regadío en la primera mitad del siglo XIX como ejemplo de modernización del olivar en toda la comarca. El museo muestra los diversos procesos del tratamiento de la aceituna, desde la recogida a la prensa, y hace hincapié en el cultivo del olivo y su importancia en el modelo de economía local. Muestra también diversos tipos de almazaras y varias prensas originales procedentes de cortijos y almazaras andaluzas.
Dónde: Hacienda La Laguna, Puente del Obispo (a 9 km. de Baeza, dirección Jaén).
Horario: cerrado por vacaciones hasta el 27 de julio de 2023. Te recomiendo confirmar el horario en los teléfonos 953 76 51 42 y 687 06 74 73 (atienden por WhatsApp).
Entrada: 4,50 €. Mayores de 65 años, 3,50 €. Menores de 5 a 12 años, 2 €. Menores de 5 años, gratis.
He señalado en este mapa de mi ruta por Baeza los puntos que menciono en el post. Te recomiendo que incluyas en tu viaje la visita a Úbeda. Como te decía, forman un conjunto momumental renacentista único en España, reconocido como Patrimonio de la Humanidad.