El sur de Galicia y el norte de Portugal son regiones hermanas que comparten paisajes, costumbres, historia y gastronomía. Su frontera natural es el río Miño, pero más que separar estos dos países, este río los une. A pocos kilómetros de las rías Baixas, el norte de Portugal ofrece al viajero varias ciudades monumentales que se pueden visitar en una excursión de día desde Galicia. Aquí te cuento cuatro de ellas.
Actualizado por Paco Nadal el 05 de diciembre de 2023.
Viana do Castelo, vista desde la Pousada.
Una de las ciudades monumentales y bellas del norte de Portugal. La ciudad antigua se vertebra en torno a la Praça da Republica. En ella y en las calles adyacentes abundan las mansiones de los siglos XVI y XVII, época de máximo esplendor de la ciudad, entre ellas la Misericórdia, una logia renacentista cuyos dos pisos superiores tiene sendos balcones soportados por columnas jónicas adornadas con figuras mitológicas. La contigua iglesia da Misericórdia es de 1722. Al lado, los Antigos Paços do Concelho albergaron las reuniones municipales desde el siglo XVI; la fachada muestra tres arcos de estilo gótico rematadas por otras tantas ventanas. La fuente que preside la plaza es de 1559. Siguiendo por la avenida principal, la Avenida dos Combatientes da Grande Guerra, se llega a otro de los edificios monumentales de Viana, el Museu Municipal, una gran obra barroca que alberga colecciones de cerámica y mobiliario de esa época. La Sé o iglesia Matriz, en el Largo do Instituto Histórico do Minho, es un sobrio pero bello edificio románico con influencias góticas; la portada principal es un arco ojival con una gran muestra escultórica en la que aparecen las influencias de los templos gallegos de aquella época, incluido el Pórtico de la Gloria compostelano. Un elevador permite subir hasta la basílica de Santa Luzia, desde donde se tienen las mejores vistas de la ciudad y su entorno. ¿Playa? Es famosa la de Cabedelo, con dunas y aguas muy tranquilas. Si te vas a quedar unos días en la ciudad, reserva con tiempo tu alojamiento.
Dónde: Viana do Castelo.
Interior de la ciudadela de Valença do Minho.
Otra de las joyas del norte de Portugal es Valença do Minho, una ciudad ceñida por sus murallas cuyos orígenes se remontan a la época romana. Gracias a estas fortificaciones militares, creadas para defender la frontera con España y el cruce del río, la ciudad antigua intramuros se conserva intacta. Para acceder a ella, te recomiendo hacerlo por Largo da Trapicheira la calle principal de la ciudad nueva. Por aquí cruzarás uno de los cuatro accesos al recinto (para mí uno de los más bonitos): el de las Portas do Sol, donde un magnífico túnel abovedado perfora la muralla y permite apreciar la soberbia estructura defensiva. La puerta comunica con la Praça da República, el principal espacio urbano de la ciudad vieja. Incluye dentro de tu recorrido una visita a la Igreja de S. Estevâo hacia la derecha de la plaza. Aunque encontrarás muchas tiendas para turistas, te recomiendo no perderte rua Direita, la calle principal donde podrás apreciar muchas mansiones blasonadas del siglo XVI y XVII y de otras edificaciones con fachadas de azulejos. Para conocer a fondo la localidad, no dudes en hacer una visita guiada por Valença do Minho. ¿Y dónde dormir? En la Pousada Sâo Teotonio en el extremo noreste de la ciudad, la que da al Miño. Las pousadas de Portugal vienen a ser el equivalente de los Paradores en España.
Dónde: Valença do Minho.
La fastuosidad de Braga se remonta a la época visigoda, cuando la ciudad pasó a ser sede episcopal. Por ello, la heredera de la ciudad romana de Bracara Augusta es excelsa y monumental, cuajada de palacios, iglesias y arte religioso. Bajo las ordenes del arzobispo Diego de Sousa a inicios del siglo XVI se convirtió en el gran centro de arte y cultura del norte portugués en torno a la Sé románica. La visita a la magnífica catedral es obligatoria, teniendo en cuenta que esta sede episcopal mantuvo una gran rivalidad con otra grande de la zona: la de la diócesis de Santiago de Compostela. La Porta Nova es el portón de acceso obligado al centro histórico, una magnífica obra del siglo XVIII que perteneció a la antigua muralla. Imprescindible también la visita al palacio arzobispal (Antigo Paço Arquiepiscopal Bracarense), un impresionante conjunto arquitectónico construido a lo largo de distintos periodos que evoluciona desde el gótico hasta el barroco tardío. Si quieres descubrir todos estos rincones del centro histórico reserva este free tour por Braga. Y no dejes de apreciar también los Paços do Concelho y la Biblioteca Pública, una de las salas de lectura más valiosas y bellas de Portugal.
Dónde: Sé de Braga.
Horario: todos los días de 9:30 a 12:30 y de 14:30 a 17: 30 horas (hasta las 18:30 horas en verano).
Entrada: Tesoro y Museo de la Catedral de Braga, 3 €. Capillas y coro alto, 2 €. Catedral, 2 €. También hay entradas combinadas. Puedes consultarlo todo en su página oficial.
Un puente de piedra y un río dan nombre a esta ciudad pequeña, pero también monumental. De nuevo, retrocedemos a épocas romanas para descubrir que fue el emperador Augusto quien encargó la construcción del paso para salvar la ruta Brácara (Braga) - Asturica Augusta (Astorga), punto estratégico durante siglos en las comunicaciones de la región del Minho. Del puente original romano de 24 arcos sobreviven los primeros cinco de la margen derecha. Otros 16 son ojivales, de época medieva,l con unos curiosos tajamares en forma de barca. En verano la ciudad resulta muy agradable, sobre todo por su playa fluvial, con el puente como telón de fondo, así como las alamedas y paseos peatonales que recorren ambas orillas del río. De la antigua muralla cuadrangular original solo permanecen en pie dos de los torreones, la torre de Sâo Paulo y la torre de Cadeia (cárcel). A resaltar dentro de la ciudad medieval la igreja dos Terceiros, estilo barroco (siglo XVIII); la igreja Matriz del siglo XV y el palacio de los Marqueses de Ponte de Lima, que preside la praça da República. Las casas señoriales con fachadas gótico-manuelinas y los palacetes de finales del siglo XIX como Villa Morâes, Villa Belmira y la Casa Norton de Matos abundan en el centro urbano. Si vas a hacer noche en Ponte de Lima, busca y reserva cuando antes tu alojamiento.
Dónde: Ponte de Lima.
En este mapa he marcado las cuatro ciudades portuguesas que menciono en este post y también Pontevedra en Galicia. Como veis está muy cerca de la frontera, es un plan muy agradable y sencillo de recorrer en coche. ¡Te lo recomiendo!
