Riviera Maya es la marca turística que define una de las porciones más bellas del Caribe mexicano: la que va desde Isla Blanca hasta Punta Allen, en el estado de Quintana Roo. Más de 200 kilómetros de playas, manglares, cenotes, pequeñas bahías, ruinas mayas y hoteles de todo tipo. ¿Apetecible, verdad? Te cuento qué ver y hacer en Riviera Maya, uno de los lugares imprescindibles que ver en México, así como excursiones a yacimientos arqueológicos y lugares de interés cercanos, como Mérida, la laguna de Bacalar o el buceo con tiburones ballena en Hollbox.
Actualizado por Paco Nadal el 25 de noviembre de 2020.
Es la localidad más grande y concurrida de la Riviera Maya. Donde se ubica la mayoría de hoteles (de todos los precios) y servicios. Si te va la marcha nocturna, las compras y el ambiente, este es tu sitio. Tiene largas y preciosas playas urbanas además del embarcadero desde el que salen los ferris a Cozumel. La Quinta Avenida es la calle de las compras y los restaurantes. Mucho ambiente y mucha fiesta nocturna. Pese a que se ha construido bastante, la urbanización es menos agresiva y más respetuosa con el entorno que Cancún. Un buen lugar para establecer la base desde la que explorar la Riviera Maya. En la oficina de turismo de VisitMéxico encontrarás información sobre alojamiento y actividades en Playa del Carmen.
Xcaret es un parque temático construido en torno a algunas viejas ruinas mayas que ofrece diversos espectáculos, snorkel, recorridos por un río subterráneo, mariposarios, varios restaurantes, recreación del juego de pelota maya, espectáculo nocturno, actuaciones del floclore mexicano, un acuario y muchas zonas de naturaleza. Particularmente no soy muy amante de estos sitios (y mucho menos aún de los espectáculos con delfines), pero si te gustan este tipo de parques, Xcaret no te defraudará. Abre todos los días del año. Está a seis kilómetros de Playa del Carmen por la carretera Chetumal-Puerto Juárez. También tienes la opción de reservar tu entrada a Xcaret con traslados incluidos aquí.
Cozumel es la gran isla que emerge a media hora de navegación justo en frente de Playa del Carmen. Es un lugar famoso entre los aficionados al buceo gracias al Parque Nacional Arrecifes de Cozumel. También, una de las capitales mundiales de los cruceros. De los 3,5 millones de visitantes que llegan cada año, 3 millones lo hacen a bordo de estas gigantescas ciudades flotantes. Pero aunque no seas ni submarinista ni crucerista, merece la pena alojarse en Cozumel y pasar unos días allí. En San Miguel de Cozumel, la capital, en la costa noroeste, se concentra la vida nocturna, los restaurantes, los hoteles, las tiendas y los centros de buceo. Es muy agradable pasar por el malecón al atardecer. El resto de la isla es pura playa y naturaleza. Os recomiendo ir hasta el extremo sur, al faro de Punta Celarain, una zona protegida con lagunas, manglares, dunas costeras, arrecifes, bellas playas.... ¡y muchos cocodrilos! (tranquilos, son de agua dulce; te puedes bañar en el mar sin problema). Si te alojas en la isla puedes alquilar un coche y dedicarte a recorrer sus muchas playas; las mejores están en la costa este, la que da al Caribe. Hay tres compañías de ferries que operan continuamente desde el puerto de Playa del Carmen. Solo tienes que acercarte y sacar billete para el siguiente barco. La travesía hasta Cozumel dura unos 40 minutos.
En Cozumel nace el gran arrecife coralino mesoamericano, que se extiende hasta las islas de la Bahía, en Honduras. Es el segundo sistema coralino más extenso del mundo, tras la gran barrera australiana. Es por tanto una de las mejores zonas de buceo de la costa mexicana. Los puntos de inmersión más interesantes de la isla están en la punta sur y en parte de la costa occidental, protegidas bajo la figura de Parque Marino de los Arrecifes de Cozumel. Son especialmente recomendables el arrecife Palancar, el arrecife Colombia y el Santa Rosa. Hay más de 250 especies de coral censadas en Cozumel. También abundan las tortugas, las langostas, el pez erizo, los peces trompeta.... y en general todas las especies típicas de la barreras de coral. La gran extensión y variedad del Parque Marino de los Arrecifes de Cozumel permite que haya puntos de buceo apropiados para todo tipo de buceadores.
Muy cerca de Playa del Carmen se abre una pequeña bahía conocida como Akumal. Es otro de los puntos de interés de Riviera Maya para los buceadores. Akumal significa en lengua maya "el lugar de las tortugas"?, porque a ella llegan todos los años -pese a la presión del ser humano- miles de tortugas a desovar o a crecer, comiendo el pasto que crece en su fondo. Sobre todo tortuga caguama y tortuga verde. De las ocho especies de tortugas amenazadas de desaparición que existen en el mundo, siete viven en México y cuatro de ellas se reproducen en este estado de Quintana Roo. Las primeras que llegan cada año son las caguama, que aparecen a finales de mayo. Anidan y crían aquí y se marchan en septiembre. Las verdes llegan en junio. Pero durante todo el año se pueden ver ejemplares de ambas especies nadando en los arrecifes de Akumal y pastando en las praderas arenosas de la bahía. La carey solo está de paso, no anida aquí. En época alta puede haber en la bahía unos 15.000 ejemplares de caguama y hasta 40.000 de verde. Se pueden ver buceando con equipo autónomo o con simple snorkel. En Akumal Dive Center organizan salidas de buceo para ver tortugas y otros animales marinos en la bahía.
Los cenotes son sistemas cavernarios formados en la roca caliza durante la glaciación del Pleistoceno, cuando el nivel del mar era mucho más bajo. Las bóvedas de algunas de las galerías cedieron con el tiempo y provocaron las aberturas por las que ahora accedemos los buzos. Cuando los hielos se retiraron, el nivel del mar volvió a subir y el agua salada penetró por el fondo del sistema freático mezclándose con las redes fluviales que ya recorrían estas cavernas. Por eso en la mayoría de los cenotes la parte de arriba es de agua dulce y la inferior de agua salada, más pesada que la dulce. El cenote Pit es un buen ejemplo de ello. Con 200 metros de profundidad es uno de los más insondables de la Riviera Maya. Apto solo para buceadores expertos, aunque la mayoría de excursiones comerciales se quedan entre los 18 y 30 metros, para observar la haloclina. La negritud de su fondo se hace aún más espectral por las ramas de los árboles caídos al agujero, que aparecen en la oscuridad como fantasmas petrificados. Queda cerca de Playa del Carmen y varios centros de buceo de la zona organizan salidas para bucear en él, entre ellos Koox Diving.
También hay muchos cenotes de fácil acceso y preparados para el baño, sin necesidad de ser submarinista. Uno de los más bellos y populares es el cenote Dos Ojos, a poca distancia de Playa del Carmen. Muchos visitantes viene hasta aquí solo para bañarse y chapotear en sus aguas cristalinas. Dos Ojos es también uno de los cenotes más sencillos para los buceadores. Apenas alcanza los 10 metros de profundidad. Los rayos de sol se filtran por sus dos bocas de acceso para dar vida a una fascinante escenografía de sombras y luces. Las coladas de calcita, las estalagtitas y las estalagmitas formadas hace millones de años, cuando la cueva estaba aún en superficie, adquieren una dimensión singular, como atrezzos de un acuario gigantesco. Dos Ojos es la combinación perfecta entre buceo y diversión. Pero hay muchos más cenotes accesibles y aptos para el baño, por ejemplo el Gran Cenote y el cenote Multún-Ha, ambos cerca de Tulum.
Tulum quizá sea el conjunto arqueológico más famosos y visitado de la Riviera Maya se localiza a unos 60 kilómetros al sur de Playa del Carmen, y cerca de la población del mismo nombre. Pocos son los turistas que llegan hasta aquí y se resisten a llevarse la celebérrima foto de El Castillo, un templo dedicado al Sol y a Venus en lo alto de un acantilado que cae al mar y que es una de la edificaciones más antiguas e importantes de esta ciudad, concebida según la cosmogonía maya con forma de cuadrilátero. Pero casi tanto como las ruinas, lo que atrae de Tulum son sus soberbios paisajes costeros y sus playas. Al ser declarado parque natural se preservó un buen tramo de costa de la voracidad de los emprendimientos turísticos que están llenando de ladrillo y cemento la Riviera Maya. Gracias a eso se conservó una especie de paraíso lleno de playas, palmeras, selva, cenotes... Los hoteles están detrás, a lo largo de la carretera. Hay muchos chiringuitos en las playas donde tomarse unos cócteles al atardecer o donde asistir a las famosas fiestas nocturnas de Tulum. Aquí encontrarás todos los datos para llegar y acceder a las ruinas de Tulum. También cuentas con la opción de tenerlo organizado con antelación.
Cobá es otro de los grandes yacimientos arqueológicos de Yucatán. Una ciudad maya que floreció entre los años 500 y 900 de nuestra era, anterior por tanto a Chichén Itzá. Aunque en sus últimos tiempos fue contemporánea de ésta. Entre sus atractivos está la pirámide más alta del Yucatán: Nohuch Mul, 42 metros de altura, a la que está permitido subir (actividad no recomendable para quienes tengan vértigo). Los diversos grupos arquitectónicos (más pirámides, observatorios astronómicos, juegos de pelota...) están diseminados por una gran extensión de selva, pero se pueden alquilar bicicletas para visitarlos con mayor facilidad. Cuando llegaron los españoles, Cobá estaba abandonada. No se supo de ella hasta que en el siglo XIX unos arqueólogos europeos dieron con sus ruinas comidas por la vegetación. Otros de esos sitios imprescindibles en Riviera Maya; puedes contratar una vista organizada a Cobá en este enlace que sí o sí, debes hacer en Riviera Maya.
Chichén Itza es una de las visitas obligadas en Riviera Maya. Se trata de una ciudad maya con construcciones de diversas épocas, aunque las principales corresponden al periodo clásico tardó (años 800 a 1100 de nuestra era). Se alza en la parte norcentral de la península de Yucatán, a 115 kilómetros de Mérida y 188 de Cancún, lo que permite que muchas agencias ofrezcan excursiones de día. Pero si quieres verlo con tranquilidad es mejor alquilar un coche y hacerlo por tu cuenta. La construcción principal es la gran pirámide conocida como el Castillo, con planta cuadrangular de 55 metros de lado y 24 metros de altura. Pero pese a ser el objeto de todas las fotos, Chichen Itzá es mucho más que estas pirámide dediada al dios Kukulkán. En los 20 kilómetros cuadrados que ocupa la ciudad quedan aún muchos grupos arquitectónicos, varios juegos de pelota, la Plataforma del Osario, la Gran Plaza de las Monjas y el Caracol, El Observatorio y la gran terraza de las Mil Columnas, contigua al Castillo. Además de dos cenotes, en uno de los cuales se hacían sacrificios rituales de niños. Hay dos momentos claves para la visita: los equinoccios de primavera y otoño, cuando la posición del Castillo respecto al sol crea un juego de sombras que parece una serpiente gigante, prueba de los grandes conocimientos de astrología que tenían los mayas. Si quieres conocer mínimamente el conjunto, prevé dedicarle un día completo.
La reserva de Sian Ka'an es una de la porciones más bellas y salvajes de la Riviera Maya. Y menos masificadas. Se trata de una reserva natural costera a lo largo de la pista de tierra que une Tulum con Puerto Allen, en el extremo sur de la Riviera. A lo largo de casi 50 kilómetros se suceden playas, manglares, calas, cenotes y pequeñas bahías. La pista es de tierra y arena pero se puede hacer en vehículo de alquiler, aunque mejor que sea 4x4 (lo más recomendable, para poder parar y bañarte en el lugar que quieras). También, en excursiones organizadas que recogen a los clientes en sus hoteles. La entrada está junto al pueblo de Tulum, siguiendo un cartel que pone Boca Paila. A 15 kilómetros está el centro de visitantes de Sian Ka'an, donde tienen información y alquilan kayaks y organizan paseos en barca. Otro de los atractivos de Sian Ka'an es llegar hasta Punta Allen, un pueblecito de pescadores perdido al final de todo, uno de los últimos remansos de paz y sosiego en esta ajetreada costa. Hay alojamientos muy sencillos en Punta Allen y otros de diversos precios a lo largo de la pista de tierra que viene de Tulum. Ojo porque la temporada de lluvias es en verano y la pista suele quedar anegada en esas fechas.
Holbox es una pequeña isla a unos 10 kilómetros de distancia de la costa norte de Quintana Roo. Tiene apenas 40 kilómetros de largo por dos de ancho. Holbox forma parte del área protegida de fauna y flora Yum Balam y suele recibir turistas que buscan zonas más relajadas y tranquilas que Cancún o Playa del Carmen, con alojamientos sencillos en una zona de especial belleza natural. Se puede ir a visitar la laguna Yalahu o los cercanos islotes de los Pájaros y de la Pasión. Pero lo que hecho mundialmente famoso a Holbox es un animal: el tiburón ballena, el pez más grande de los océanos. Sin que se sepa a ciencia cierta el porqué, todos los años, entre mediados de mayo y mediados de septiembre, cientos de tiburones ballena juveniles se reúnen en el agua cercanas al islote, en un fenómeno casi único en el mundo. La salidas en barco para hacer snorkel entre docenas de tiburones es la actividad más demandada de la isla en esa época. Si nunca has visto un tiburón ballena la actividad te sorprenderá, pero hay ya tantos barcos y se ha mercantilizado tanto que también es posible que la experiencia te decepcione. Se accede desde el puerto de Chiquilá, de donde salen ferris y lanchas privadas a diario hasta Hollbox. Si estás interesado en ir, puedes contratar esta excursión organizada a Holbox.
Mérida es la capital del estado de Yucatán, una ciudad de casi 800.000 habitantes, que conserva un interesante centro histórico con multitud de casas de época colonial y de los primeros años de la República. La mayoría de ellas –como el palacio Cantón o la casa Montejo- se asoman al Paseo Montejo, la avenida central de la ciudad. Merece la pena visitar la catedral, dar un paseo en calesa por el casco antiguo, visitar alguno de sus muchos museos (en el palacio Cantón está el museo Regional, con importantes piezas mayas), sentarse a ver pasar el tiempo y los parroquianos en alguna de las agradables placitas del centro o saborear alguna de las especialidades de la cocina yucateca, como los panuchos, la sopa de lima o la cochinita pibil. Esta es la web oficial de Turismo de Mérida, con todo tipo de información práctica para visitar la ciudad.
La laguna de Bacalar conocida también como la laguna de los Siete Colores, por las diversas tonalidades que presentan en función de cómo incidan los rayos del sol, esta formada por varios cenotes cuyo nivel freático desbordó la propia boca y creo una laguna permanente. Se localiza a unos 275 kilómetros al sur de Playa del Carmen (algo más de tres horas), y a solo 40 de la población de Chetumal. Hay varios alojamientos en la orilla de la laguna y muchas actividades náuticas para hacer, desde motos de agua a paseos en kayak. Autobuses Ado viaja a diario entre Playa del Carmen y Bacalar. Muchas agencias locales, entre ellas Tours Riviera Maya, organizan excursiones a la laguna desde diversas localidades de la zona.
Una de las inmersiones más excitantes que la Riviera Maya ofrece a los amantes del buceo es con el tiburón toro. El toro es en teoría una de las cuatro especies de escualos más peligrosas para el ser humano, pero bucear con ellos no entraña ningún riesgo. Por fenómenos marinos que aún no se conocen con certeza, cada mes de noviembre llegan a la zona de Playa del Carmen docenas de tiburón toro, en especial hembras maduras preñadas. Permanecen en la zona hasta mediados de marzo. Varios centros de buceo de la zona ofrecen la posibilidad de sumergirse en busca de estos magníficos animales. Yo lo hice con Phantom Divers. Los avistamientos se suelen hacer en un fondo arenoso entre 18 y 24 metros de profundidad, a apenas 500 metros de la bocana del puerto de Playa del Carmen. Son de la especie carcharhinus leucas, conocidos en inglés como bull shark y aquí en el Caribe mexicano como tiburones toro, aunque no tienen nada que ver con el carcharias taurus, llamado pez toro en español. Aunque se les ofrezca carnada, no siempre está asegurado que aparezcan.
La Riviera Maya tiene un relieve prácticamente plano y cubierto por bosques semitropicales secos y manglares. Es muy fácil moverse en coche de alquiler, aunque las distancia de norte a sur pueden ser muy tediosas. Si no quieres conducir, al ser una zona muy turística encontrarás en todos los hoteles y agencias de viaje excursiones organizadas con traslados y guía a todos los puntos de interés que te detallo en este post.