Una ruta de pintxos por San Sebastián es la mejor manera de adentrarse en las peculiaridades de esta bellísima ciudad vasca. Comer bien en Donosti es casi una obligación. Y sus famosos bares de pinxtos (o tapas), la mejor manera de socializar como un auténtico vasco. Te cuento 10 bares imprescindibles de Donosti en sus tres zonas emblemáticas: la parte vieja, la zona de Gros y el centro.
Publicado por Paco Nadal el 22 de noviembre de 2021.
Una antigua bodega y venta de vinos a granel que ha conservado el encanto de los anaqueles de madera y el espíritu de antaño. Famoso el pintxo Indurain, dedicado al ciclista: también el mini (bonito, guindillas y anchoa) y el pulpo a la brasa con base de patatas y pimentón
Tanto el restaurante como la barra de pintxos, están a cargo del chef Juan Mari Humada, que fue Premio a la Mejor Recetea en 2018. Pide el volcán de morcilla con yema y compota de manzana. Sublime también el pintxo de almejas en escabeche y crema de coliflor y las alcachofas en textura con foie.
Uno de los clásicos de la parte vieja, con una barra llena de fuentes de pintxos que entra hambre solo de verla. Suele estar a reventar, difícil encontrar hueco en horas punta. Hay que pedir su famosa tartaleta de changurro y el tamboril.
Otro de los imprescindibles en una ruta de pintxos por el casco antiguo. Ha sido galardonado en 2021 con el premio Bar de Bares en la Semana Gastronómica de Donosti. Su especialidad indiscutible: las anchoas.
Famoso asador del casco antiguo con una barra de pintxos formidable. Tienes que probar alguna de sus célebres brochetas (de pato, de gambas, de cordero, de chuleta o de vieiras). También a destacar las croquetas de bacalao, el foie a la plancha y el pimiento relleno de txangurro.
Pequeño e icónico bar del casco viejo con muchísima personalidad. No hay producto sobre la barra porque todos los pintxos se elaboran al momento, es la marca de la casa. Fantástico el risotto de Idiazábal, la oreja, las carrilleras o el kebab. Suele estar a tope.
Abierto en 1942 y regentado por la tercera generación de la misma familia. Otro de los que no puedes pasar por alto en una ruta por lo viejo. Especialidad en pintxos de huevo, gildas, pastel de pescado y pimiento relleno de bonito con salsa tártara.
Un bar pequeño y anodino, que podría pasar desapercibido, pero que es uno de los que mejor trata el producto local en sus pintxos. La especialidad es el Arzak (cazuelita con patata, pimiento rojo y huevo). También la anchoa con pimiento verde y la vieira a la plancha con remolacha y puré de patata trufada.
Un histórico de la restauración donostiarra, fundado en 1928. Lo regenta la tercera generación de la misma familia. Siguen haciendo los pintxos de la abuela (morro en salda, albóndigas, fritos de La Espiga, milanesas o el Jalisco) junto a otros de nueva creación.
Presumen de que aquí se inventó la Gilda. Sea o no así, lo cierto es que las preparan sublimes… y auténticas: es decir, solo con anchoa, aceituna y piparras, como debe ser la Gilda. Aparte de estas, otros imprescindibles son los embutidos de Jabugo, el queso y la tortilla de bacalao.
Encuentra bajo el icono verde la ubicación de los bares de pintxos de San Sebastián recomendados en este post y ¡disfruta de una exquisita gastronomía!