¿Veraneas en La Manga del Mar Menor y estás buscando dónde comer, cenar o tomar una copa viendo el mar? Te cuento dónde están los mejores chiringuitos y restaurantes a pie de playa de La Manga, esa increíble franja de arena entre Cartagena y San Javier que es un paraíso, aunque podría haberlo sido más si no la hubieran jodido con tanto cemento. Ordenados, además, desde la entrada a La Manga hasta el final, es decir, del km 0 al km 19. Y con mapa de ubicación al final del post.
Actualizado por Paco Nadal el 09 de julio de 2024.
Es el primer chiringuito que aparece al entrar en La Manga. Está en la playa de los Alemanes, en el mar Menor, justo al inicio de la pista de tierra que va (o viene) a Playa Paraíso, donde anteriormente se encontraba el Pata Palo Sunset. Un lugar famosísimo para ver atardecer. La oferta gastronómica es sencilla, pero ideal para gustos sencillos: desde unas papas o unas croquetas hasta una hamburguesa o un costillar. Abren todos los días desde mediodía hasta medianoche y la cocina no cierra.
Uno de los restaurantes a pie de playa más elegantes de la zona y con mejor relación entre ubicación, precio y calidad de La Manga. Atardeceres espectaculares, servicio profesional (aunque tienen sus días) y cocina mediterránea bien trabajada. Tiene otra zona de copas. En la playa de los Alemanes, kilómetro 1. Mejor que a comer, ve a cenar (por los atardeceres).
Al lado del anterior y con los mismos atardeceres sobre el mar Menor. La cocina está bien aunque es menos selecta que en el Maloca (ensaladas, hamburguesas, pizzas, sándwiches...). Por la noche, tras la hora de cena, se transforma en uno de los lugares más animados para copas, cócteles y ambiente chill en la playa.
Un clásico de Cabo Palos, ubicado en la bellisima playa de Levante. Por las mañanas tiene ambiente familiar y por la tarde, mucha gente joven, copas y voley-playa. Y chill out por la noche. Carta clásica: arroces, pulpo, ensaladas, hamburguesas de Angus, pizzas. Y como especialidad, el tinto de verano con un toque de canela.
Uno de los tres que hay en la playa de la isla del Ciervo, en el lado del mar Menor, famosísimo spot para amantes del kitesurf en el kilómetro 3. Tiene también escuela de vela. Carnes y pescados a la parrilla, también arroces. Bueno para ir a tomar una copa al atardecer.
A continuación del anterior y muy frecuentado también por kitesurferos. Alquilan hamacas, tiene buenos cócteles, tapeo y comidas de chiringuito (sardinas, boquerones, pulpo a la cartagenera, calamar, atún rojo…). Ambiente joven y música dj's por las noches. Hasta el año pasado se llamaba Lebeche.
Un histórico de La Manga, en el kilómetro 3, playa de la isla del Ciervo. Ubicación fantástica para tomar un mojito al atardecer, aunque la gestión y el mantenimiento eran un poco, digamos, hippies. Parece ser que el año pasado cambió la gerencia y mejoró el servicio.
Uno de mis favoritos en La Manga. Si le pones unos hippies con bongos y doblas los precios... ¡parecería Ibiza! Es el antiguo Makondo, que cerró hace un par de años, y fue reabierto por los mismos dueños de La Cangreja. Está a continuación del ZM, entrando por la carretera que va al club náutico Dos Mares. Cocina de creatividad y fusión, tal y como ofrecían en el antiguo local de La Palera de Cabo de Palos. Y con un servicio muy esmerado. La ubicación es privilegiada: frente a la isla del Ciervo y con unos atardeceres gloriosos sobre el mar Menor (merece la pena reservar en el primer turno y disfrutar de ese espectáculo). Este año, además, han ampliado con una zona más informal de tapeo y hamburguesas abajo (abre a las 19:00 y no hace falta reservar) y otra zona de hamacas sobre césped artificial para ver el atardecer. Y luego está su famoso bar de cócteles y copas chill out arriba, en una colina, con mejores vistas todavía. Uno de los locales de moda también este verano.
Posiblemente, el mejor chiringuito en la zona del Mediterráneo, aunque también tiene sus días (creo que ha bajado un poco de calidad desde que abrieron). En el kilómetro 3, en la misma playa del hotel Galúa y cerca de la plaza Bohemia. Tiene una carta reducida, pero muy original, con pan bao, hamburguesas, street food y arroces. Tumbones y sombrillas, fiestas chill out con DJ los fines de semana y muy buen ambiente playero.
Se llama así, obviamente, por la nacionalidad de su dueño, un tipo la mar de majo y simpático. Una de las pocas ofertas a pie de playa en la parte del Mediterráneo (Km 10). Auténtico chiringuito de playa con sillones, hamacas y sombrillas. Bebidas, buenos cócteles, algo de tapeo (no de cocina) y buen rollo. Para disfrutar de un día en la arena en un playazo espectacular, con cerveza fría cerca.
Uno de mis sitios favoritos en La Manga. Tampoco es un chiringuito, sino uno de los pocos restaurantes a pie de playa, del lado del mar Menor. Con un gran salón con ventanales y una estupenda terraza en la pequeña bahía de El Pedruchillo, km 8, con zona de comidas y cenas y otra de copas. Muy buenos los arroces y una carta original, más allá de los típicos pescados o carne. Servicio muy profesional.
Está dentro del puerto Tomás Maestre, en la dársena norte, pero abren la cancela a los no socios llamándoles por teléfono. Para ser un chiringuito, se come razonablemente bien. Cocina clásica: sardinas, boquerones, chopitos, ensaladilla, croquetas, etc. Pero ya digo, de una calidad superior a la media. Junto al canal del Estacio, por lo que no tiene playa delante ni te puedes bañar. Muy agradable y tranquilo para cenar. Y perfecto si vas en barco.
Uno de los sitios más populares al final de La Manga, en el lado del mar Menor. Es grande (capacidad para 200 personas), con cocina tradicional y aceptable típìca de chiringuito (arroces, carnes, pescados, hamburguesas, tapas murcianas) y a pie de playa. Ideal para pasar el día bañándose, sobre todo si vas con niños, y comer sin tener que desplazarte y casi casi sin quitarte la arena de los pies. Inmensos los atardeceres.
Otro de los históricos (abrió en 1975) y sin duda uno de los mejores y más selectos restaurantes a pie de playa de La Manga, en el lado del mar Menor, en el kilómetro 15. Increíbles atardeceres. No es barato, pero el servicio y la calidad del producto lo justifican. Los fines de semana de verano está solicitadísimo, mejor reservar con tiempo.
Lo más chic de La Manga. Ubicado al final, en el kilómetro 19, muy cerca ya de las salinas, merece la pena ir solo por ver el edificio. Un chalet futurista mandado construir por un ministro de Franco en los años 60 que aún hoy impresiona por sus formas. Tiene piscina (acceso, 15 €), camas Vip (oferta para dos personas con dos cocteles y aperitivo por 60 €) y un buen restaurante. Nada que ver con la idea prefijada que tienes de chiringuito de playa, vamos.