Si has pensado viajar a Japón, debes tener en cuenta cuándo es la mejor época. El país es maravilloso, pero cambia mucho de una temporada a otra.
Actualizado por Paco Nadal el 16 de noviembre de 2022.
Japón es un universo diferente a cualquier otro lugar que hayas visto antes, un viaje que nunca decepciona. Hay dos momentos muy especiales para visitar Japón: primavera y otoño.
En primavera florecen los cerezos y buena parte del país se tiñe de blanco; es un periodo gozoso para la vista conocido como hanami (en japonés, "ver flores"), pero muy efímero, así que hay que atinar muy bien con las fechas del viaje para verlo... además de tener un poco de suerte. Tradicionalmente, en Tokio la floración de los cerezos empieza hacia el 26 de marzo y dura unos 10 días. En Kioto empieza una semana más tarde. Pero en zonas altas y frías, como la montaña sagrada de Koyasán, pueden estar en flor bien entrado abril. Todo esto está siendo alterado en los últimos años por el cambio climático y las fechas que siempre se manejaron como constantes pueden variar; y de hecho, varían. En el despiece te explico cómo saber las fechas aproximadas del sakura, la floración de los cerezos cada año.
Para mí, la mejor época para viajar a Japón es otoño, entre principios de noviembre y principios de diciembre, cuando los bosques de arces y ginkgos biloba están repletos de tonalidades ocres y amarillas (aunque al ser temporada alta encontrarás aglomeraciones en los puntos de mayor interés turístico). De todas formas, ten en cuenta que el país es muy alargado de norte a sur, por lo que el otoño empieza antes en la isla de Hokkaido (norte) y llega más tarde al sur de Honshu (isla principal), donde están Tokio y Kioto. También influyen las temperaturas y las lluvias. Lo normal es que en la zona de Tokio y Kioto el esplendor del otoño llegue en la segunda quincena de noviembre. Pero ha habido años en que he encontrado esos colores mágicos en los jardines de Kioto a principios de ese mes y otros en los que, a la tercera semana, los arces estaban aún verdes.
Si puedes, evita el periodo del 16 de abril al 19 de mayo: son las vacaciones oficiales de las empresas niponas y está todo lleno de turistas nacionales y los precios se disparan.
Los meses de julio y agosto son de un calor húmedo y pegajoso insoportable en casi todo Japón (exceptuando la isla de Hokkaido, al norte); aún así, si solo tienes vacaciones en esos meses, no dejes de ir a Japón: te fascinará de igual forma.
La temporada baja coincide con nuestro invierno (de enero a marzo), cuando la nieve y el frío hacen que los precios bajen y que haya mayor demanda por las actividades de nieve. Es la mejor temporada para ver el monte Fuji nevado. Japón en Navidad y Año Nuevo es también muy recomendable; el paisaje esté yermo y los árboles sin hoja pero pese a que el país no es cristiano, las calles de las grandes ciudades se engalanan con luces y ambiente navideño. Eso sí, la tradición japonesa de visitar santuarios y monasterios los días 1, 2 y 3 de enero hace que las colas para acceder a los principales y más turísticos templos sean interminables. Sirva como ejemplo que solo en esos tres días pasan tres millones de personas por el santuario Meiji de Tokio. Ármate de paciencia.
El peor mes para visitar Japón es junio (y hasta mediados de julio) porque es cuando más llueve.