Ouarzazate se ubica al sur de Marruecos próxima al Alto Atlas y al valle del Draa. Es también conocida como “la puerta del desierto” por ser la antesala al gran Sahara. Es ideal para desde ahí organizar una excursión al desierto de Merzouga o empezar la ruta de las Kasbahs. Si eres amante del cine además de las visitas imprescindibles que en este post te recomiendo, no dejes de visitar el Atlas Studios, los estudios cinematográficos más importantes de Marruecos que ahí se ubican. Ouarzazate ha sido escenario gracias a sus fascinantes paisajes de producciones estelares como Lawrence de Arabia, La Guerra de las Galaxias, La momia, Astérix y Obélix o Gladiator. Incluso la serie Juego de Tronos.
Publicado por Ida Plaza el 21 de julio de 2021.
Una primera inmersión gastronómica en esta zona del país incluye probar el famoso tajín (tagine). Es un plato de barro cocido y esmaltado que lleva una tapa cónica. Esta tapa mantiene el calor y el vapor durante horas para la cocción. Los hay solo de vegetales, de pollo con limón y aceitunas, de pollo con ciruelas y almendras, una auténtica delicia y muy sano. Por supuesto que también puedes deleitarte con un magnífico cous cous, con unos kebabs, con el kefta -una forma deliciosa de cocinar la carne picada- o la pastella, una especie de hojaldre relleno de pollo y especies matizado con azúcar y canela. En la avenida Mohammed V (la artería principal) están los restaurantes Kasbah Tafarnout y Le jardin des Aromes ubicados en la parte moderna de la ciudad y el Manar du Sud y Douyria ubicados en la parte antigua. Algunos con terrazas muy agradables. Los amantes de los dulces quedarán fascinados con los postres marroquíes. Elaborados a base de pistachos, nueces, almendras, dátiles, sésamo, agua de azahar, azúcar, limón, naranja, miel, huevos, harina y vainilla en forma de galletas, bizcochos, rosquillas, panes… ¡son la perdición!
Tanto Ouarzazate como Marruecos tiene una artesanía local preciosa, pero comprar a lo largo de su territorio y sus infinitos zocos se convierte en todo un acto de valentía. ¡Es agotador! Cuando te das cuenta has estado regateando 50 céntimos de euro durante más de cinco minutos. ¡Ridículo! Aún así, es difícil abstenerse el volver a casa sin un recuerdo. Mi consejo, divide entre dos el primer precio que te den por algo y ya luego negocia. Aquí el precio que pagas es el valor que tú le das a cada objeto. En Ouarzazate interesante son las mantas de algodón que trabajan los hombres y las alfombras de lana de cordero que confeccionan las mujeres. También verás gran cantidad de cerámica, platos, ceniceros, tajines, etc… o chilabas, pañuelos, babuchas de todos los colores y diseño, lámparas, adornos, especies, joyería…¡una locura! Larga vida al regateo.