Un viaje al norte de Noruega es una experiencia impactante. La naturaleza aquí no tiene límites: ocupa a sus anchas todo el espacio que necesita y despliega toda su fuerza, sin cortarse. En verano domina el poético sol de medianoche y en invierno serpentean en el cielo las auroras boreales. Y siempre, rodeados de mar, de fiordos, de glaciares y de miles de islas e islotes, ríos, picos y mesetas. Naturaleza en estado puro, porque la belleza también puede ser gélida. Bienvenidos a la provincia de Nordland, puerta de acceso a la Noruega más ártica.
Actualizado por Ida Plaza el 14 de diciembre de 2023.
© Orsolya Haarberg
Esta ruta norte en Noruega empieza en Mosjøen. Lo que en un inicio fue un pequeño poblado de casas pesqueras en la costa norte de Noruega, terminó siendo el corazón y centro de la provincia de Norland. Mosjøen se ubica a medio camino entre las ciudades de Tromsø y Trondheim y es la ciudad más antigua de Helgeland, la zona de la provincia de Norland que se encuentra al sur del Círculo Polar Ártico. Fueron los ingleses quienes a mediados del siglo XIX aterrizaron en esta zona con la revolución industrial y desarrollaron una industria maderera para abastecer de material noble a las ciudades que florecían en Gran Bretaña. Así, Mosjøen se convirtió en la primera ciudad oficial de la región. Aunque no te impresionará a primera vista, su privilegiado entorno natural y su centro histórico —dominado por la calle Sjøgata— son razones suficientes para usarla como base para una aventura ártica en este territorio. A Mosjøen se llega en avión desde Oslo, con escala en Trondheim.
Dónde: Mosjøen.
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Imprescindible en Mosjøen es la visita a la Sjøgata, la arteria central de este antiguo poblado costero. La muestra arquitectónica y edificios en perfecto estado de conservación de esta calle y alrededores te sumergirá en el encanto de las típicas aldeas noruegas, con sus coloridas casitas de madera. Y te permitirá imaginar el esplendor y la actividad que empapaba estas calles a mediados del siglo XIX. En el centro de la ciudad se encuentra el museo Vefsne, que ofrece una exposición sobre el desarrollo urbano en Helgeland y la historia antes de que la ciudad fuera fundada. Para alojarse, te recomiendo el Fru Haugans Hotel, en pleno centro de la ciudad a orillas del río Vefsna. Es el hotel más antiguo del norte de Noruega: lleva desde 1794 acogiendo huéspedes bajo el mando de interesantes y valientes mujeres. Ellen y Sverre Løvold Strand son la encantadora pareja que regentan en la actualidad el hotel. Toda la propiedad ha pertenecido a la misma familia desde 1885 y aunque está reformado y tiene un edificio nuevo, mantiene la parte antigua tal cual fue e inclusive cuentan con museo propio. Un simpático restaurante para cenar es el Blomsterbua mat og vin, también propiedad del Fru Haugans Hotel, pero ubicado a unas cuantas calles de él.
© Are Halse
Desde Mosjøen es sencillo organizar excursiones de un día. Su privilegiada ubicación, a los pies de la montaña Øyfjellet, ofrece múltiples opciones. Muy cerca de la ciudad hay una vía ferrata (la ruta está clasificada como B / C, de fácil a moderadamente difícil) que empieza en un sendero sherpa recién construido hasta el paso de Trongskaret. La vía ferrata comienza a 350 metros de altitud y culmina a 660 metros. La increíble vista de Mosjøen y sus alrededores en este punto bien merece la pena. También hay una tirolina (de 700 metros de largo, que termina en los jardines del Fru Haugans Hotel). Y si lo que te gusta es el agua, es posible pasear en kayaks por el río Vefsna o alquilar una cabaña de pescadores (rorbu) en una de las islas cerca al continente. En invierno la actividad estrella es sin duda la excursión con raquetas por la nieve en busca de las auroras boreales. Saborear un café preparado sobre una fogata de leña en pleno bosque es un momento muy especial. Y si tienes la suerte de vislumbrar un alce, "el rey del bosque", serás un auténtico privilegiado. Una empresa de actividades recomendable es Naturlige Helgeland, con un buen conocimiento y control de las actividades en esta zona.
La siguiente parada sería Lovund, una de las miles de islas que jalonan las costas de Helgeland. Para llegar a Lovund debes trasladarte de Mosjøen a Sandnessjøen por tierra (una hora aproximadamente) y allí coger un ferry a la isla de Lovund. El trayecto dura aproximadamente dos horas y llega Stokkvågen, el puerto de la isla. El Travel Pass Norland es una tarjeta de transporte público noruego que te permite cubrir estos trayectos. Lovund tiene apenas cinco kilómetros cuadrados y es célebre por su enorme industria salmonera, pero también por su espectacular naturaleza. Una gran montaña caracteriza la isla: su silueta y las vistas en este punto del país son realmente bellas (en días despejados). Desde Lovund se organizan excursiones en barco, visitas a granjas de acuicultura y observación de auroras boreales (entre mediados de septiembre y principios de abril). Para los amantes de las aves, Lovund es sencillamente el paraíso. La isla alberga una gran colonia de frailecillos (puffins) que anida en las paredes de la gran montaña que domina la vertiente oeste de la isla. Este espacio está protegido como reserva natural Lundeura y se calcula que hay unas 200.000 parejas. El Lundkommardagen, que se celebra el 14 de abril, es el día en que los frailecillos llegan en bandadas para anidar durante la primavera aprovechando el poderoso muro de piedra. Para alojarte: Lovund Hotel; un alojamiento de exquisito gusto y encanto. Si quieres pegarte un buen homenaje de salmón, no dejes de comer o cenar en Maaken, el restaurante del Lovund Hotel.
Dónde: Lovund.
Nesna es el escenario perfecto para disfrutar activamente de la naturaleza. Es un municipio de Nordland y también parte de Helgeland. Nesna es un pueblo costero al que se puede llegar por la Kystriksveien (la autopista costera que recorre Nordland) aunque también tiene conexión por ferry desde Sandenssjøen o desde Lovund (en caso de que sigas la ruta que te propongo). Este trayecto también se puede comprar a través del Travel Pass Norland. La ciudad está rodeada de islas muy escénicas como Hugla, Handnesøya y Tomma, por donde se programan las excursiones. Nesna tiene un pequeño puerto y una población con buen porcentaje de estudiantes universitarios ya que aquí está la Nesna University College. Aunque las actividades estrellas son la de aire libre, como por ejemplo el safari de águilas marinas. Interesante también es la visita al Bygdemuseum, donde encontrarás la historia local vinculada a las costumbres y oficios en territorio ártico. Visit Nesna es una empresa de actividades de aventura locales que conoce bien la zona. Te la recomiendo para cualquier actividad. Si vas a comer o cenar en Nesna te recomiendo el restaurante Aurora. En esta web tienes información sobre alojamientos y actividades en esta zona.
Dónde: Nesna.
Mo i Rana (Mo para los amigos) es una ciudad ubicada al sur de Saltfjellet (más adelante te hablo de esta localidad) al sur del Círculo Polar Ártico en Norland. Es la tercera ciudad más grande del norte de Noruega. Como el resto de las ciudades de este país está rodeada de una privilegiada naturaleza: fiordos, bosques de abetos, cuevas y glaciares. Una de las excursiones más interesantes que hacer desde Mo es la visita a Grønligrotta y Sætergrotta, dos de las cuevas de piedra caliza más grandes de las 200 que se encuentran en esta zona. Cientos de miles de años se han necesitado para que el agua y el hielo las formen, un auténtico espectáculo. Pero en Mo i Rana también hay historia. Moholmen, la parte antigua y centro de la ciudad alberga antiguos edificios que datan del siglo XVII, una verdadera joya que merece la pena visitar.
Dónde: Mo i Rana.
¿Atravesar el impresionante paisaje del norte de Noruega en tren? Excitante (como mínimo) para cualquier viajero. El ferrocarril de Nordland (o del norte) transita entre las ciudades de Trondheim y Bodø. En total, 729 kilómetros con 44 estaciones, 293 puentes y 154 túneles cruzando el Círculo Polar Ártico. Todo el trayecto dura aproximadamente 10 horas, pero es posible usarlo solo entre estaciones intermedias. Una alternativa excelente para cubrir trayectos por este territorio. Tanto en invierno como en verano el viaje es único: no olvidarás las panorámicas que aparecen entre el mar y la montaña. Te recomiendo hacer el trayecto de Mo i Rana hacia el Círculo Polar Ártico, bajando en la estación de Lønsdal para disfrutar en la curiosa localidad de Saltfjellet de una auténtica experiencia sami. VY (antes NSB) es un grupo de transporte nórdico que gestiona el transporte de pasajeros en tren y autobús. Puedes comprar los billetes en su web.
En Saltfjellet se encuentra el Saltfjellet / Svartisen, uno de los parques nacionales —para muchos— más bellos de Noruega. Aunque hay tanta naturaleza virgen y bella en este país que no podría confirmarlo. Pero este área es privilegiada: alberga el segundo campo de hielo más grande de Noruega. Llegar a la localidad de Saltfjellet es muy sencillo con el ferrocarril de Norland: sube en la estación de Mo i Rana y baja en la estación de Lønsdal, junto a la carretera E6 (o la carretera del Ártico). Un buen (y creo que único) lugar para alojarte es el Saltfjellet Hotell, ideal para visitar la zona y disfrutar experiencias al aire libre, como la pesca y el senderismo. Esta zona es también un área tradicional de pastoreo de renos y por ende un territorio muy vinculado a la comunidad sami. Estando en la tierra de los samis no puedes perder la oportunidad de conocer su cultura, costumbres e historia. Visitar monumentos sami, conducir un trineo de renos o compartir una cena con una familia sami en Oskdal es increíble. En el hotel te gestionan la experiencia.
Dónde: Saltfjellet / Svartisen.
Bodø es la capital y área urbana más poblada de la provincia de Nordland. Se ubica entre el mar y el territorio interior de Noruega, debido a la estrechez del país en este punto de su geografía. Tiene vuelo directo desde Oslo, pero si sigues la ruta que te propongo en este post, lo suyo es llegar en el ferrocarril de Norland. Bodø es la estación final de trayecto del norte de Noruega. La ciudad está rodeada de suficientes recursos naturales como para vivir aventuras inolvidables, Si hablamos de naturaleza, los imprescindibles serían ver el sol de medianoche, las auroras boreales, el Saltstraumen (la corriente de agua más fuerte del mundo) o avistar una de las mejores colonias de águilas marinas en Europa. Si hablamos de cultura: asistir a festivales de música, caminar por la ruta de arte urbano de la ciudad o visitar el museo de Aviación de Noruega. Tienes más información de todo lo que se puede hacer en Bodø, en este otro post.
Dónde: Bodø.
